El faro de Cabo Busto no es
exactamente uno de esos lugares donde parece que se termina el mundo pero para
las almas solitarias posee el encanto de tener la casa más cercana a kilómetro
y medio. Cuando después de dejar la autovía del Cantábrico atraviesas Busto la
modesta carretera solamente tiene un destino: el faro. Es realmente bonito
verlo al fondo y, poco a poco, ir acercándote a él.
El faro de Cabo Busto fue
inaugurado el 1 de abril de 1.858 dentro del Primer Plan de Alumbrado con la
finalidad de cubrir un amplio sector de penumbras existente entre Cabo Peñas y
Estaca de Bares, en Galicia.
El edificio original tenía
forma rectangular, con una sola planta, el enlucido de las fachadas era de
color blanco y los remates de esquinas, zócalos y contacto con el techo de
piedra lisa. El tejado era de pizarra natural, a juego con las cubiertas
tradicionales de la zona. En 1.920 se reforma y se amplía el edificio al que se
le da forma de “U” instalando en la parte nueva dos viviendas que dan a la cara
Sur.
La torre primitiva estaba
situada en el centro de la fachada Norte, adosada al edificio. Su forma era
cuadrada y estaba rematada por una barandilla de hierro y torreón decagonal
sobre el que se situaba la linterna. En una reforma posterior, en 1.962, la torre fue sustituida por la actual, un prisma
cuadrado sin el menor encanto.
Las características
luminosas de este faro son grupos de 4 destellos cada 20 segundos. Su plano
focal se eleva a casi 95 metros sobre el nivel del mar y a 10 sobre el terreno
y su alcance es de 21 millas.
En el Libro de este faro
constan anotaciones de que antes de la Guerra Civil, en tiempos de la República,
uno de los fareros de entonces hacía las veces de maestro y hasta el faro acudían
algunos niños de Busto a recibir sus clases.
*Los datos técnicos referentes
al faro han sido tomados del libro "Faros del litoral asturiano", de
Belén Menéndez Solar.
El viejo farero.
7 comentarios:
Me encantó tu entrada. Conozco muy poco sobre faros. Siempre me parecian tristes y solitarios. Pero desde que te visito han recobrado vida para mi, a pesar de la transformacion que la mayoria han tenido.
Un abraXo!
Me alegra que este blog te esté cambiando un poquito esa imagen que tenías de los faros. No todos están en lugares solitarios, los hay en plena playa, en puertos o en paseos marítimos rodeados de edificios. Para mí solamente hay un tipo de faro que transmite tristeza: aquel que ya no tiene farero y en sus paredes, en sus ventanas, se hace patente el abandono de unos y el vandalismo de otros. De los 19 faros a los que he entrado hasta ahora 5 me los han enseñado los fareros que viven en ellos y te puedo asegurar que cuando te abren la puerta para entrar, para subir a la torre, de alguna manera percibes que te están dejando entrar en algo que miman y que forma parte de sus vidas. Uno de estos días os hablaré de eso.
Un beso desde el Sur.
En otos blogs se pueden ver fotos o leer datos sobre faros, éste tuyo es diferente, tú haces que las historias se vivan y siembras la semilla del amor hacia estas torres y hacia quienes trabajan en ellas. Gracias farero por enseñarme el mundo de los faros.
Merche.
Somos muchos los que nos sentimos atraídos por esto de los faros, tal vez la diferencia entre unos y otros sea haber entrado a ellos, y es que cuando te enseñan un faro por dentro, cuando te dejan subir sus escaleras, ver la óptica... o entrar a sus almacenes y ver las máquinas antiguas, los libros... entonces comienzas a verlos de otra manera. Si gracias a estos blogs el mundo de los faros te atrae un poquito más yo me alegro.
Un saludo desde el Sur.
¡Que pprecioso y bien cuidado está este faro! ¡Qué bonita sensación despierta! Un abrazo.
Hola Francisco, soy de Sevilla y me ha impactado enormemente descubrir tu agradable blog sobre faros, el más completo creo, por las historias que cuentas en él...yo hace 5-6 años me dí cuenta en los viajecillos que hacía por España y Portugal que mi instinto me llevaba a visitar los acantilados y costas, donde empezé a fijarme también en los faros que me iba encontrando... algunos me los he dejado en el tintero (no les hice fotos, quiero decir), pero descubrí una afición que de repente surgió, la cual era excusa perfecta para conocer lugares: localizar un faro y al mismo tiempo conocer sus alrededores... estupenda manera de viajar...
Yo tambien tengo un blog con algunas fotillos de faros, y aunque no tengo los hermosos relatos que tu escribes, me gustaría le echaras un vistazo Francisco, por el respeto que tengo a tu afición, que es la mía también, y es que veo además que has estado en lugares en los que yo he estado y adoro (de Portugal sobre todo, por cierto, ahora en Agosto voy a perseguir
los que me quedan de Lisboa y alrededores, cosa que he visto ya has realizado de manera hermosa e insuperable hace unos meses en éste tu blog), y me agrada, en definitiva, descubrir que hay alguien cuya pasión por los faros es mayor que la mía y tiene un blog estupendo como el tuyo.
Un abrazo
Alberto
Mi blog es http://rascamelaespalda.blogspot.com.es/
Hola Alberto: Muchas gracias por tus palabras, he visitado tu blog y veo que tenemos muchas cosas en común.
En los alrededores de Lisboa hay varios faros. Cuando yo hice la ruta me quedé sin poder fotografiar (ni ver) el de Bugio: me pilló un día de niebla que lo hacía imposible.
Si quieres alguna información sobre los faros de esa zona y puedo ayudarte no dudes en pedírmela, puedes hacerlo al correo del blog: elfaro2010@hotmail.es
Ya me contarás como te ha ido en ese viaje que espero que lo disfrutes tanto como yo el mío.
Un saludo desde la misma Sevilla.
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